Tortos asturianos

Un verdadero tesoro de la gastronomía asturiana: los tortos de maíz. Vuelvo entusiasmada de un fin de semana en Ribadesella donde gracias a la generosidad y hospitalidad de la familia de Feli, en el Hotel Puente del Pilar, he aprendido a hacer los archifamosos tortos, que acompañados de un simple pero exquisito huevo frito es de esos platos de origen popular que te encuentras por muchísimos rincones de España y que te dejan sin habla.

Son unas tortas hechas con harina de maíz y fritas. Lo primero que se nos ocurre es que podrían ser mexicanas perfectamente ya que se parecen tanto a las que ellos utilizan para muchos de sus platillos. Y resulta que precisamente de México llegó  a Asturias el maiz a principios del s.XVII desde donde se extendió por todo el Viejo Mundo convirtiéndose en base de alimentación de muchos pueblos.

Para cuando me quise dar cuenta, Fernando, hijo de Feli y magnífico chef de la cocina del hotel, ya tenía preparados los ingredientes para enseñarme a preparar los tortos.

Para hacer la masa, se pone la harina en un cuenco y se va añadiendo el agua templada, más bien caliente, con sal. Se mezcla bien hasta que se puede formar una bola y entonces se amasa hasta que esté suave y bien ligada. Se envuelve en un trapo y se deja reposar al menos 1/2 hora. Pasado este tiempo, se forman unas bolas y se aplastan con las manos para darles forma de torta.

Ahora sólo falta freír los tortos en abundante aceite caliente hasta que se doren bien por los dos lados. Se dejan escurrir sobre papel absorbente y...¡listos!

Desde que volví de Ribadesella no he parado de hacer tortos y los acompaño con todo lo que se me ocurre. Prueba con pisto y huevo escalfado...¡espectacular!

Y por supuesto, no dejeis de ir al Hotel Puente del Pilar, de esos sitios con un encanto especial donde además de trataros de maravilla comeréis de cine. ¡Muchísimas gracias a Feli, Fernando y todo el equipo del hotel!